Del papel al Twitter

Pasadas grandes décadas en la historia de esta maravilla como es el periodismo, podemos realizar una vuelta a todo lo que lo concierna, desde los primeros escritos romanos hasta noticias que corren en redes sociales en cuestión de segundos. La coincidencia sería que hasta hace 10 años todo se basaba en llegar al mayor público posible, pero viviendo en una sociedad tan moderna debemos basarnos en una serie de principios los cuales se pueden concentrar en dos grandes bloques que respectan a todos y cada uno de los interesados: estar al día y lo antes posible.

Si nos centramos en la base por la que se empezó este gran invento, veremos que durante años las noticias comentadas durante el día a día eran las aparecidas en los diarios, bien fueran de deporte o de política. Un ejemplo cualquiera pueden ser los mundiales de fútbol, cuyos partidos eran debatidos, no durante su transcurso, sino cuando habían acabado y salían a circular la mañana siguiente. Evidentemente todo esto fue aumentando, tanto que se ha llegado al extremo de tener casi por obligación saber una noticia o estar informado de cualquier cosa, ya que disponemos de medios suficientes. Pero la pregunta que todo el mundo se hace suena en palabras como: ¿es esto algo bueno para todos nosotros? ¿O terminará por derrumbar la industria de papel en la información? Desde un punto de vista progresivo la respuesta es sí, basándonos en poder avanzar cada año más y poder llegar al momento en el que todos dispongamos de una información como, donde y cuando nosotros queramos. Sin embargo desde otra perspectiva vemos que la contestación es negativa, debido a la gran falta de ingresos que dejaría a causa de una población que cada vez se acostumbra más al término 'gratis' y no al 'pagar por lo que quiero'. 

Tras esto se encuentra un peldaño más, el de la rapidez. Cada instante bajan en cualquier aplicación de nuestro ordenador, teléfono o tableta una anotación que contiene la información justa y precisa para llegar lo más adelantada posible a nuestro entorno para difundirse por todo aquel que esté interesado. Haciendo referencia a este punto vemos que lo importante no es como llegue redactada o adecuada a la situación comunicativa, lo esencial es que llegue la primera. Y no es solo esto, lo más asombroso es que todas y cada una de estas APPs son totalmente gratuitas, dejando en evidencia a todo aquel que paga por leer 'lo mismo' en unos 'trozos de papel'.

Así sin más se plantea un panorama que deja muy claro lo que pasará con el progreso de estas redes en las que a la milésima obtenemos una noticia que puede agradarnos o no, y que a la vez deja menos hueco a algo tan simple como comprar y hacer uso de un periódico.

Comentarios

Entradas populares